viernes, noviembre 25, 2016

Mi casa y mi corazón




(sueño de libertad)

Si salgo un día a la vida
mi casa no tendrá llaves:
siempre abierta, como el mar,
el sol y el aire.

Que entren la noche y el día,
y la lluvia azul, la tarde,
el rojo pan de la aurora;
La luna, mi dulce amante.

Que la amistad no detenga
sus pasos en mis umbrales,
ni la golondrina el vuelo,
ni el amor sus labios. Nadie.

Mi casa y mi corazón
nunca cerrados: que pasen
los pájaros, los amigos,
el sol y el aire.

Marcos Ana

Inés Saavedra

Decidme cómo es un árbol




Decidme cómo es un árbol.
Decidme el canto de un río,
cuando se cubre de pájaros.

Habladme del mar. Habladme
del olor ancho del campo.
De las estrellas. Del aire.

Recitadme un horizonte
sin cerradura y sin llaves
como la choza de un pobre.

Decidme cómo es el beso
de una mujer. Dadme el nombre
del amor: no lo recuerdo.

¿Aún las noches se perfuman
de enamorados con tiemblos
de pasión bajo la luna?

¿O solo queda esta fosa,
la luz de una cerradura
y la canción de mis losas?

Veintidós años... ya olvido
la dimensión de las cosas,
su color, su aroma...

Escribo a tientas: el mar, el campo...
Digo bosque y he perdido
la geometría de un árbol.

Hablo por hablar de asuntos
que los años me borraron.

(No puedo seguir: escucho
los pasos del funcionario).

Marcos Ana
In memoriam

jueves, noviembre 24, 2016

Adán


Árbol de sangre moja la mañana
por donde gime la recién parida.
Su voz deja cristales en la herida
y un gráfico de hueso en la ventana.

Mientras la luz que viene fija y gana
blancas metas de fábula que olvida
el tumulto de venas en la huida
hacia el turbio frescor de la manzana.

Adán sueña en la fiebre de la arcilla
un niño que se acerca galopando
por el doble latir de su mejilla.

Pero otro Adán oscuro está soñando
neutra luna de piedra sin semilla
donde el niño de luz se irá quemando.

Federico García Lorca

Enrique Morente

Carmen Linares y Manolo Sanlúcar

miércoles, noviembre 23, 2016

Heces


Esta tarde llueve, como nunca; y no
tengo ganas de vivir, corazón.

Esta tarde es dulce. Por qué no ha de ser?
Viste de gracia y pena; viste de mujer.

Esta tarde en Lima llueve. Y yo recuerdo
las cavernas crueles de mi ingratitud;
mi bloque de hielo sobre su amapola,
más fuerte que su "No seas así!"

Mis violentas flores negras; y la bárbara
y enorme pedrada; y el trecho glacial.
Y pondrá el silencio de su dignidad
con óleos quemantes el punto final.

Por eso esta tarde, como nunca, voy
con este búho, con este corazón.

Y otras pasan; y viéndome tan triste,
toman un poquito de ti
en la abrupta arruga de mi hondo dolor.

Esta tarde llueve, llueve mucho. ¡Y no
tengo ganas de vivir, corazón!

César Vallejo

Susana Baca

martes, noviembre 22, 2016

Rima IV


Allá en la playa quedó la niña.
¡Arriba el ancla! ¡Se va el vapor!
El marinero canta entre dientes.
Se hunde en el agua trémula el sol.
¡Adiós! ¡Adiós!

Sola, llorando sobre las olas,
mira que vuela la embarcación.
Aún me hace señas con el pañuelo
desde la piedra donde quedó.
¡Adiós! ¡Adiós!

Vistió de negro la niña hermosa.
¡Las despedidas tan tristes son!
Llevaba suelta la cabellera
y en las pupilas llanto y amor.
¡Adiós! ¡Adiós!

Rubén Darío

Amaral

lunes, noviembre 21, 2016

La muerte del niño herido


Otra vez en la noche… Es el martillo
de la fiebre en las sienes bien vendadas
del niño. —Madre, ¡el pájaro amarillo!
¡Las mariposas negras y moradas!

—Duerme, hijo mío. —Y la manita oprime
la madre, junto al lecho. —¡Oh, flor de fuego!
¿Quién ha de helarte, flor de sangre, dime?
Hay en la pobre alcoba olor de espliego;

fuera, la oronda luna que blanquea
cúpula y torre a la ciudad sombría.
Invisible avión moscardonea.

—¿Duermes, oh dulce flor de sangre mía?
El cristal del balcón repiquetea.
—¡Oh, fría, fría, fría, fría, fría!

Antonio Machado

Elisa Serna

martes, noviembre 15, 2016

De la mano del alba


De la mano del alba
mi niña viene,
la carita tan blanca
como la nieve.
De la mano del aire
mi niña pasa,
moviendo las alitas
de las espaldas.

Cada tarde en el parque
sentadita en un banco
pinta arbolitos de verde,
pinta patitos de blanco.
Y una tarde de verano
que tenía mucha sed
pintó una fuente con agua
y a ella se fue a beber.

De la mano….

Que me dejen con mi niña
la de la boquita chica.
Que me dejen con mi niña
la de los ojitos grandes.
Que me dejen con mi niña
la que a mi pecho creció,
que no quiero yo otra niña,
que no quiero otra, no.

De la mano…

Abre las ventanas,
cierra la puerta:
que pase y se quede
la primavera.

De la mano…

Isabel Escudero

Antonio Selfa

domingo, noviembre 13, 2016

Vamos juntos


Con tu puedo y con mi quiero
vamos juntos compañero

    compañero te desvela
    la misma suerte que a mí
    prometiste y prometí
    encender esta candela

con tu puedo y con mi quiero
vamos juntos compañero

    la muerte mata y escucha
    la vida viene después
    la unidad que sirve es
    la que nos une en la lucha

con tu puedo y con mi quiero
vamos juntos compañero

    la historia tañe sonora
    su lección como campana
    para gozar el mañana
    hay que pelear el ahora

con tu puedo y con mi quiero
vamos juntos compañero

    ya no somos inocentes
    ni en la mala ni en la buena
    cada cual en su faena
    porque en esto no hay suplentes

con tu puedo y con mi quiero
vamos juntos compañero

    algunos cantan victoria
    porque el pueblo paga vidas
    pero esas muertes queridas
    van escribiendo la historia

con tu puedo y con mi quiero
vamos juntos compañero.

Mario Benedetti

Luis Pastor

sábado, noviembre 12, 2016

Quisiera un verso manchado


Quisiera un verso manchado
por la cal y por la grasa.
Verso de andamio y de forja
para el son de mi guitarra.

Quisiera un verso caliente
para el frío de tu casa.
Verso crecido en la tierra
como crece la mañana.

Quisiera estar en tu copla
cuando el vino te acompaña,
y repartirme en los vasos
que alimentan tu esperanza.

Y quisiera estar contigo
cuando el hambre te traspasa,
y hacerte un pan amasado
con sudor y con palabras.

Carlos Álvarez

Luis Pastor

viernes, noviembre 11, 2016

Take this waltz




Now in Vienna there's ten pretty women
There's a shoulder where Death comes to cry
There's a lobby with nine hundred windows
There's a tree where the doves go to die
There's a piece that was torn from the morning
And it hangs in the Gallery of Frost
Ay, Ay, Ay, Ay
Take this waltz, take this waltz
Take this waltz with the clamp on its jaws

Oh I want you, I want you, I want you
On a chair with a dead magazine
In the cave at the tip of the lily
In some hallways where love's never been
On a bed where the moon has been sweating
In a cry filled with footsteps and sand
Ay, Ay, Ay, Ay
Take this waltz, take this waltz
Take its broken waist in your hand

This waltz, this waltz, this waltz, this waltz
With its very own breath of brandy and Death
Dragging its tail in the sea

There's a concert hall in Vienna
Where your mouth had a thousand reviews
There's a bar where the boys have stopped talking
They've been sentenced to death by the blues
Ah, but who is it climbs to your picture
With a garland of freshly cut tears?
Ay, Ay, Ay, Ay
Take this waltz, take this waltz
Take this waltz it's been dying for years

There's an attic where children are playing
Where I've got to lie down with you soon
In a dream of Hungarian lanterns
In the mist of some sweet afternoon
And I'll see what you've chained to your sorrow
All your sheep and your lilies of snow
Ay, Ay, Ay, Ay
Take this waltz, take this waltz
With its "I'll never forget you, you know!"

This waltz, this waltz, this waltz, this waltz ...

And I'll dance with you in Vienna
I'll be wearing a river's disguise
The hyacinth wild on my shoulder,
My mouth on the dew of your thighs
And I'll bury my soul in a scrapbook,
With the photographs there, and the moss
And I'll yield to the flood of your beauty
My cheap violin and my cross
And you'll carry me down on your dancing
To the pools that you lift on your wrist
Oh my love, Oh my love
Take this waltz, take this waltz
It's yours now. It's all that there is

                    Leonard Cohen a partir de
                   "Pequeño vals vienés" de F. García Lorca


Leonard Cohen

Entrada original en esta APM

In memoriam

domingo, noviembre 06, 2016

Agua, ¿dónde vas?


Agua, ¿dónde vas?

Riyendo voy por el río
a las orillas del mar.

Mar, ¿adónde vas?

Río arriba voy buscando
fuente donde descansar.

Chopo, y tú ¿qué harás?

No quiero decirte nada.
Yo... ¡temblar!

¡Qué deseo, qué no deseo,
por el río y por la mar!

(Cuatro pájaros sin rumbo
en el alto chopo están).

Federico García Lorca

José Mercé